Los grillz son unas piezas metálicas que se colocan sobre los dientes para darles un aspecto más llamativo y personalizado. Son muy populares entre los artistas, especialmente los músicos, que los usan como una forma de expresar su estilo y personalidad. Pero, ¿sabes qué son los grillz, cómo se ponen y qué materiales son los mejores y los peores para su construcción? En este artículo te lo contamos todo.

¿Qué son los grillz?

Los grillz, también conocidos como grills o parrillas para los dientes, son unas fundas o coronas metálicas que se adaptan a la forma de los dientes y que pueden estar hechas de distintos materiales, como oro, plata, platino o diamantes. Los grillz son un tipo de joya dental que se coloca en uno o más dientes para decorar la sonrisa con una finalidad puramente estética.

Los grillz pueden cubrir un diente individual o una serie de dientes, según la preferencia de la persona. También pueden ser removibles o permanentes, dependiendo de si se quieren llevar de forma ocasional o permanente. Los grillz removibles no necesitan una preparación previa del diente, mientras que los grillz permanentes requieren un tallado del diente para fijarlos con un cemento especial.

¿Cómo se ponen los grillz?

Para ponerse los grillz, lo primero que hay que hacer es acudir al dentista y hacerse una revisión bucodental. Es importante retirar el sarro, tratar las caries y detectar si hay alguna enfermedad periodontal o gingivitis que pueda complicarse con el uso de los grillz. El dentista también tomará una impresión de la boca para hacer un molde de los dientes donde se colocarán los grillz.

Una vez que se tiene el molde, se puede elegir el diseño y el material de los grillz. Los grillz se fabrican a medida en un laboratorio dental, donde se ajustan al tamaño y la forma de los dientes. Cuando los grillz están listos, se pueden colocar en la boca, ya sea de forma removible o permanente, según el tipo de grillz que se haya elegido.

¿Qué materiales son los mejores y los peores para los grillz?

Los materiales más comunes para los grillz son el oro, la plata, el platino y los diamantes. Cada uno de estos materiales tiene sus ventajas y sus inconvenientes, tanto desde el punto de vista estético como desde el punto de vista de la salud bucodental.

• Grillz de oro: son una de las opciones más caras y ostentosas. El oro es un metal noble que no se oxida ni se corroe, por lo que es muy duradero y resistente. Además, el oro es un material biocompatible, es decir, que no produce alergias ni reacciones adversas en el organismo. Sin embargo, el oro también tiene algunos inconvenientes, como su elevado peso, que puede causar molestias o dificultades para hablar o masticar, y su color amarillo, que puede contrastar demasiado con el tono natural de los dientes.
• Grillz de plata: son una opción más económica que los grillz de oro, pero también muy popular entre quienes los llevan. La plata es un metal que tiene un brillo y una elegancia que lo hacen muy atractivo. Además, la plata es un material que se puede combinar con otros metales o con piedras preciosas para crear diseños más variados y originales. No obstante, la plata también tiene algunos aspectos negativos, como su tendencia a oxidarse y a oscurecerse con el tiempo, lo que puede afectar a su aspecto y a su higiene. Además, la plata puede causar alergias o irritaciones en algunas personas, por lo que se recomienda hacer una prueba de sensibilidad antes de usarla.
• Grillz de platino: son los más exclusivos y los más caros de todos los materiales que existen. El platino es un metal muy raro y muy valioso, que tiene un brillo y una pureza incomparables. El platino es también un material muy resistente y duradero, que no se oxida ni se corroe, y que es biocompatible, por lo que no produce alergias ni reacciones adversas. Sin embargo, el platino también tiene algunos inconvenientes, como su elevado peso, que puede causar molestias o dificultades para hablar o masticar, y su elevado precio, que lo hace inaccesible para la mayoría de las personas.
• Grillz de diamantes: son los más llamativos y los más personalizados de todos los materiales que existen. Los diamantes son piedras preciosas que se pueden adherir sobre una base de oro o de plata, creando diseños únicos y espectaculares. Los diamantes tienen un brillo y una dureza que los hacen muy atractivos y resistentes. Además, los diamantes son biocompatibles, por lo que no producen alergias ni reacciones adversas. No obstante, los diamantes también tienen algunos aspectos negativos, como su elevado precio, que los hace inaccesibles para la mayoría de las personas, y su dificultad para limpiarlos, ya que pueden acumular restos de comida o de saliva entre las piedras.

¿Qué cuidados hay que tener con los grillz?

Los grillz son accesorios dentales que requieren una serie de cuidados especiales para mantenerlos en buen estado y para evitar problemas de salud bucodental. Algunos de los cuidados que hay que tener con los grillz son los siguientes:

• Limpiar los grillz a diario: es importante limpiar los grillz todos los días, tanto si son removibles como si son permanentes, para eliminar los restos de comida, de saliva y de bacterias que se puedan quedar adheridos a ellos. Para limpiar los grillz, se puede usar un cepillo de dientes suave, agua y jabón neutro, o un producto específico para la limpieza de metales o de joyas. Se debe evitar el uso de productos abrasivos o corrosivos, como el alcohol, el vinagre o el limón, que pueden dañar el material de los grillz.
• Limpiar los dientes a diario: además de limpiar los grillz, también es importante limpiar los dientes todos los días, tanto los que llevan los grillz como los que no, para evitar la acumulación de placa bacteriana, el sarro, las caries y las enfermedades periodontales. Para limpiar los dientes, se debe usar un cepillo de dientes suave, una pasta de dientes con flúor y un hilo dental. También se puede usar un enjuague bucal para completar la higiene.
• Quitar los grillz para comer: si los grillz son removibles, se recomienda quitarlos para comer, ya que pueden interferir con la masticación, el sabor y la digestión de los alimentos. Además, al quitar los grillz para comer, se evita que se ensucien o que se dañen con los alimentos.
• Visitar al dentista regularmente: es fundamental visitar al dentista al menos una vez al año, o con más frecuencia si se llevan grillz, para hacerse una revisión bucodental y detectar cualquier problema que pueda surgir con los grillz o con los dientes. El dentista también podrá aconsejar sobre el uso adecuado de los grillz y sobre los posibles riesgos que pueden tener para la salud bucodental.

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